El elogio del error
En el imaginario colectivo, profesar y perpetuar una materia económica significa complicarse la vida con números, sinónimos, índices y dictámenes que resuelven cientificamente cualquier situación se quiera analizar.
En el caso del “Revenue Management” hablamos de un sector que influye en los destinos turísticos, determina los beneficios y reescribe los estados financieros de las empresas hoteleras (y no solo) y que se difunde solamente gracias a la profundización, a la investigación, al desarrollo, a la cultura mediática – correcta o no – que se está arraigando en la red, sacando provecho de la moda del momento. Hasta hace unos años, las Universidades Italianas dieron la espalda al Revenue Management en todos sus planos de estudio: yo mismo en los primeros años de la decada del 2000, en la Facultad de Economía del Turísmo, una facultad italiana a la vanguardia, no he oido hablar nunca de las técnicas de Revenue Management Hotelero (ni mucho menos del Yield Management que en aquel entonces estaba muy de moda) … ¡como si las habitaciones de hotel se vendieran solas!
Hoy en día el Revenue Management ha entrado a ser parte de distintos Máster y planos de estudios, pero todavía la única preocupación de los “organizadores” es encontrar un “docente decente” y no una “docencia decente”.
La actividad de enseñanza es muchas veces un copia y pega de interpretaciones ya escuchadas una y otra vez, leídas y debatidas ya muchas veces, con el resultado obvio de que antes o después el estudiante reinterpretará y reinventará una disciplina que no tiene muchos secretos.
Sí, porqué si hoy cualquiera puede ser consultor (en el diccionario RAE: “Persona experta en una materia sobre la que asesora profesionalmente.”), pocos son los realmente expertos en materia y, por eso, no muchos pueden seguir formándose con la base de su propia experiencia.
Por lo tanto, si el Revenue procede de la experiencia, del estudio y del numero de experimentos llevados a cabo, el constante éxito a corto, medio y largo plazo procede del análisis constante de los errores cometidos.
No hay sitio para los errores ajenos: errar se vuelve una clara señal de mejoría.
En la medicina, en la metereología, en los análisis probabilísticos, en la física, en el álgebra y en las ciencias en general, la teoría de los errores ayuda a minimizar los fracasos.
En el RM hace falta analizar los errores de tarifación de partida o de dinamicidad tarifaria o de identificación del equilibrio tarifario o de la tarifa de resistencia de un solo día, para determinar y mejorar el resultado RevPar del mismo día del año siguiente.
Esto simplifica todo
Esto lo cambia todo, porqué basta con tener humildad y propensión al cambio para tener una ventaja sobre los que piensan que “las matemáticas nunca fallan”.
Los pasos son:
Hacer una análisis del histórico, redactar una tarifa de partida, dinamizar la tarifa según la demanda, distribuir la visibilidad de manera creativa y optimizada. Estudiar el resultado.
Repetir los pasos.
Hacer un análisis del histórico, redactar una tarifa de partida, dinamizar la tarifa según la demanda, distribuir la visibilidad de manera creativa y optimizada. Obtienes resultados mejores que los anteriores. No te conformes.
Repetir otra vez.
Hacer un análisis del histórico, redactar una tarifa de partida, dinamizar la tarifa según la demanda, distribuir la visibilidad de manera creativa y optimizada. Obtienes resultados todavía mejores que los anteriores. No te conformes.
Repetir otra vez.
“He acertado 11 veces la canasta decisiva sobre la bocina, y por lo menos otras 17 veces a menos de diez segundos del final, aunque he fallado más de 9000 tiros en mi carrera. He perdido casi 300 partidos. 26 veces mis compañeros han confiado en mi para lanzar el tiro decisivo y lo he fallado. He fracasado una y otra vez en mi vida y eso es por lo que tengo éxito”. Frases de Michael Jordan
Emiliano Viola